La madrugada del 27 de Febrero del 2010 fue un remezón para todos, más todavía para la gente de la costa de la VII y VIII región, que vieron como el gran esfuerzo de sus vidas era tragado por el mar...
En mi lista de propósitos para el 2010, en el punto 7 tengo escrito "conocer un nuevo lugar de Chile", pensaba que con nuestro viaje a principios de Febrero desde Iloca hasta Concepción, siguiendo la ruta de la costa, ya podía tacharlo de la lista, propósito 7 cumplido, pero después del terremoto no creo que pueda hacerlo, ya que todos los lindo lugares que conocí Constitución, Chanco, Peyuhue, Buchupureo, Cobquecura y Dichato entre otros poblados del camino, ya no existen.
La costa que conocí ya no existe, de la casa de la playa en Iloca donde pasabamos los veranos con mi familia solo queda el radier y un pedazo de reja que el mar quiso dejarnos para que la recordáramos. Atrás quedaron los aperitivos en la terraza mirando el mar, dormirse escuchando el sonido de las olas, las peleas por la mejor reposera para tomar sol, las visitas a la feria artesanal, a Duao a comprar pescado...
Ya llegará el tiempo de la reconstrucción, pero la calle de mi querida Iloca nunca vovlerá a ser la misma, por eso, como último homenaje, dejo estas fotos, tomadas en diferentes años
Plaza de Iloca.
En la terraza
Mi mamá, bordando... como siempre
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